La higiene del cabello puede determinar la salud de tu melena
Tener una buena higiene del cabello es vital para una melena y un cuero cabelludo saludables. Estos son los pasos a seguir para lograrlo.
¿Sabías que, en promedio, nos tocamos el pelo alrededor de cuatro veces por hora? Esto, además de la contaminación, la almohada, el sudor y otros factores, hace que nuestro cabello y cuero cabelludo estén expuestos todo el tiempo a una serie de impurezas y bacterias que pueden afectarlos, por lo que la higiene del cabello —su limpieza para mantener la salud y prevenir enfermedades— juega un papel fundamental.
¿Por qué es importante la higiene del cabello?
La importancia de la higiene del cabello radica en evitar afecciones en el cuero cabelludo. Aunque no se ven, existen bacterias en el cabello que pueden afectar el estado y la apariencia de nuestra cabellera, al igual que la salud de nuestro cuero cabelludo. Si tu cuero cabelludo no está sano y fuerte, tu pelo tampoco lo estará.
Existen varios tipos de bacterias. Hay algunas que se conocen como bacterias residentes, ya que forman parte de la flora habitual de la piel y el cuero cabelludo, como la Staphylococcus capitis.
También existe la posibilidad de que algunas bacterias se transmitan del medio ambiente o de otras partes del cuerpo, como de nuestras manos al tocarnos frecuentemente el pelo. Entre estas bacterias, conocidas como transitorias, se encuentran Escherichia coli y Staphylococcus aureus. Ambas pueden adherirse a la fibra capilar debido a una mala higiene y la segunda también puede colonizar los tallos del cabello.
El mal olor, las erupciones, el exceso de sebo, la resequedad, comezón, irritación, sensibilidad, textura acartonada y rojez son síntomas de un cuero cabelludo desequilibrado. Desatenderlos puede detonar enfermedades tópicas e, incluso, la pérdida capilar. ¡Toma nota de lo que debes hacer para evitarlo!
¿Cuáles son los pasos para tener una buena higiene del cabello?
Cepillar
Este paso previo al lavado es fundamental para retirar cualquier residuo que pueda quedar acumulado en el pelo. Eso sí, debes hacerlo con un cepillo limpio, ya que en este se pueden quedar depositadas bacterias, restos de productos y suciedad del ambiente. La mayoría de los cepillos de pelo se pueden lavar con agua y shampoo.
Lavar
Este es el principal de los pasos para la higiene del cabello. Importa el cómo y el qué. Para lograr un lavado efectivo, debes aplicar un poco de shampoo en tus manos —nunca directamente sobre el pelo— y masajear el cuero cabelludo con la yema de los dedos (no olvides la parte baja de la cabeza y la zona detrás de las orejas).
Con la misma espuma que creas en la raíz, lava el resto de tu pelo y enjuaga. También puedes exfoliar el cuero cabelludo con un poco de bicarbonato de sodio.
Editor’s tip: El agua caliente disuelve mejor la suciedad y grasa que se acumula en el cuero cabelludo y las fibras, pero también reseca el cabello e incrementa su porosidad. Por ello, prefiere una temperatura media en tu ducha.
Si vives en la ciudad y quieres minimizar los estragos de la contaminación, limpiando tu pelo a profundidad al mismo tiempo que lo hidratas y suavizas, te encantará el shampoo TRESemmé Detox Anticontaminación Purifica. Su fórmula con aloe vera y aceite de coco arrasa con el smog y las impurezas del ambiente. Además, no contiene parabenos ni colorantes y ayuda a prevenir el exceso de oleosidad.
Editor’s tip: Para una persona que tiene el cuero cabelludo más bien graso y se lava el pelo en días alternos, los sulfatos son una alternativa muy buena a pesar de su mala fama. ¡No les temas!
Ahora bien, si te gusta lavarte el pelo con mayor frecuencia, nuestra recomendación es emplear un producto sin sal y con el pH balanceado, como el shampoo Sedal Detox Anticontaminación. Adicionado con té verde y limón, dos conocidos antioxidantes y revitalizantes, dejará tu melena reluciente sin resecarla.
Acondicionar
A diario, el cabello se enfrenta a múltiples factores que abren la cutícula, dejándola expuesta al daño. Desde el medio ambiente, hasta tu rutina de estilizado e, incluso, el mismo proceso de lavado, ocasionan esta condición casi de manera imperceptible.
Por sus propiedades humectantes, el acondicionador pule, alisa, cierra y sella la hebra capilar, volviendo tu melena mucho más resistente ante el deterioro. Además, crea una película protectora alrededor del pelo que propicia la elasticidad, mitiga la deshidratación y evita la pérdida de nutrientes.
Acondicionar después de realizar una buena limpieza resulta en una melena suave, brillante, libre de nudos y mucho más fácil de peinar. El superhidratante diario Dove Reconstrucción Completa, formulado con una potente mezcla de nutrientes activos, cubre las necesidades cotidianas del pelo maltratado en apenas un minuto. Aplícalo de medios a puntas, dale unos minutos a que haga efecto y enjuaga nuevamente.
Secar
Usar una toalla limpia es parte de la higiene del cabello. En caso de recurrir herramientas de estilizado como la secadora, plancha o tenazas, asegúrate de asearlas correctamente.
Para la secadora, revisa el filtro y remueve pelusas y suciedad. No olvides limpiar las placas de la plancha. Asegúrate de que las herramientas estén frías y desconectadas al momento de limpiarlas; y cada que las uses sin limpiar, recuerda que todas esas impurezas pueden terminar en tu cuero cabelludo y en el pelo, desencadenando distintas afecciones.
Editor’s tip: No olvides lavar frecuentemente tus sábanas, toallas y todos los accesorios que uses regularmente en tu pelo, como gorras, diademas y más.
¿Con qué frecuencia debo lavar el cabello?
Esta es una de las preguntas que más nos hacen con respecto a la higiene del cabello, sobre todo en nuestra cuenta de Instagram: ¿Se debe lavar el cabello diario? ¿Dos o tres veces a la semana? Y la respuesta es, nada más y nada menos que las veces que tu cabello lo necesite.
La frecuencia de lavado dependerá de varios factores, como por ejemplo, tu tipo de pelo, tus actividades cotidianas, la forma en la que estilizas y los productos que usas. Ahora bien, no lavarse el pelo en una semana jamás será saludable: según tus necesidades, podrías hacerlo diario, cada segundo o tercer día. Si tienes comezón en el cuero cabelludo y el pelo visiblemente seboso, probablemente debas lavarlo más seguido.
Editor’s tip: Si utilizas shampoo en seco y no te lavas el pelo, este puede acumularse y derivar en una foliculitis, un tipo de infección bacteriana. Evita emplear este tipo de producto por dos días consecutivos.
¿Cuáles son los beneficios de la buena higiene del cabello?
Determinadas rutinas de lavado o cuidado del cabello pueden interferir en la salud del cuero cabelludo y ser causantes del agravamientos de patologías o condiciones previamente existentes. Un buen lavado —aquel que permita limpiar sin retirar la película hidrolipídica del cabello y sin agredir el equilibrio de grasa y humedad necesario del cuero cabelludo— es vital para contribuir a tener un pelo más brillante, bonito y suave. Las áreas más favorecidas por la buena higiene del cabello son:
Salud
Partiendo de la base de un cuero cabelludo saludable, nuestra melena también crecerá sana, hidratada y con brillo. Por el contrario, una mala higiene del cabello puede desencadenar una serie de enfermedades y padecimientos capilares, como la caspa, la irritación, el enrojecimiento y más.
Aspecto
Además de que el pelo puede adquirir una apariencia sebosa y descuidada, el olor puede también ser percibido por los demás como algo desagradable. El cabello sucio pierde volumen y brillo, luciendo opaco y maltratado.
Estado de ánimo
Nuestro propio estado de ánimo también se ve afectado. No es lo mismo tener la confianza de que nuestro pelo está limpio y huele bien, a estar vulnerables e inseguras por lo contrario.
Para finalizar, no olvides que la higiene del cabello y del cuero cabelludo forman parte de tu rutina de aseo personal. ¡Tu melena debe ser igual de importante que otras partes de tu cuerpo!