¿Cada cuánto se debe lavar el cabello según los expertos? ¡Te revelamos todo!
No es malo lavarse el cabello diario, pero depende de las necesidades de tu melena. Te decimos cada cuánto se debe lavar el cabello en cada situación.
Aunque es una duda muy recurrente, no existe una verdad absoluta sobre cada cuánto se debe lavar el cabello. La frecuencia de lavado depende de factores como la textura del cabello, su nivel de grasa, el grado de procesamiento, los hábitos de vida y la edad.
Por regla general, si está visiblemente graso, tienes comezón en el cuero cabelludo o experimentas alguna descamación debido a la suciedad o los residuos, pueden ser señales de que necesitas lavarlo más seguido.
Pero para no llegar a este punto, lo mejor es conocer tu melena. Sigue leyendo y aprende a identificar sus necesidades.
¿Es malo lavarse el cabello diario?
No es malo lavarse el cabello a diario, pero depende factores como la textura del cabello, su nivel de grasa, el grado de procesamiento, los hábitos de vida y la edad.
El shampoo limpia el cuero cabelludo y el cabello al eliminar los contaminantes ambientales como el polvo y el polen, además de la caspa, el sudor y los productos para el cuidado del cabello.
También disuelve el sebo, una sustancia aceitosa y cerosa que producen las glándulas sebáceas cercanas a los folículos pilosos. El sebo evita que el cuero cabelludo se reseque demasiado y protege la piel de las infecciones, pero, si se acumula, puede causar problemas.
Leon Van Gorkom, gerente senior de investigación y desarrollo de cabello en Unilever, lo pone en blanco y negro: “Lavarse con un buen shampoo y acondicionador no es dañino para el cabello”, aclara el experto. “Realmente depende del consumidor [determinar] qué se ajusta a su rutina diaria”.
Ahora bien, de acuerdo con Lynne Goldberg, dermatóloga y directora de la clínica para el cabello de Boston Medical Center, lavar el cabello más de lo necesario —más de una vez al día— sí puede llegar a perjudicarlo, porque estarás eliminando constantemente los aceites naturales que produce el cuero cabelludo, esenciales para mantenerlo saludable, sobre todo si usas un shampoo de limpieza profunda.
Si lavas tu melena en exceso también conseguirás que tu cuero cabelludo, al ser despojado de sus aceites naturales, se dé a la tarea de producir más. Esto promoverá la aparición de grasa, la resequedad en las puntas y, por ende, el quiebre y la caída del pelo.
Editor’s tip: Puedes identificar si estás lavando tu pelo más de lo necesario si se siente grueso, opaco, reseco y rebelde.
¿Cada cuánto se lava el cabello?
Hicimos una encuesta en Instagram (@allthingshairmex) para preguntarles a nuestras seguidoras cada cuánto se lavan el pelo y, de un total aproximado de 5,000 participantes, la respuesta promedio fue cinco veces a la semana. Además, muchas nos confesaron que han probado espaciando los lavados pero, aunque para algunas ha sido benéfico, otras confiesan que los resultados no son lo que esperaban.
En general, se recomienda lavar el cabello a diario en el caso de los hombres y cada dos días en el caso de las mujeres, pero es muy variable. Aquí hay algunos puntos a considerar:
- Tipo de cabello. Algunas personas tienen cabello graso y necesitan lavarlo con más frecuencia para controlar la producción de grasa. Otras tienen cabello seco y lavarlo todos los días podría resecarlo aún más.
- Exposición a factores externos. Si tu cabello está expuesto regularmente a factores que lo ensucian, como el polvo, la contaminación o el sudor, puede ser necesario lavarlo más a menudo para mantenerlo limpio.
- Estado del cuero cabelludo. Lavarte el cabello con demasiada frecuencia podría irritar el cuero cabelludo, especialmente si usas productos agresivos o agua caliente.
En resumen, no hay una respuesta única para todos. Es importante conocer tu tipo de cabello y cuero cabelludo, así como observar cómo reacciona tu cabello al lavado diario. Si notas que tu cabello se vuelve seco, quebradizo o que tu cuero cabelludo se irrita, podrías considerar reducir la frecuencia de lavado o buscar alternativas más suaves de limpieza.
Editor’s tip: Si experimentas picazón, descamación, acumulación de productos, hebras grasosas u olores desagradables en tu cabello, plantéate aumentar la frecuencia de lavado.
¿Cuándo lavar el cabello diario?
Utilizar shampoo todos los días puede ser la mejor opción para las personas con cuero cabelludo graso, pues es posible que el sebo se acumule y haga que el cabello se vuelva apelmazado, grasoso y maloliente.
Las personas con cabello delgado quizá también noten que se les engrasa con más rapidez, porque tienen menos pelo para absorber el sebo. En su caso, podría recomendarse el lavado diario.
También puede ser necesario si utilizas con frecuencia productos como geles o aerosoles, que suelen acumularse en el cuero cabelludo y causar irritación, o incluso impedir el crecimiento del cabello, ya que obstruyen los folículos pilosos.
Por último, si tienes caspa, ya sea seca o seborreica, debes lavarte el cabello con regularidad para enjuagar las escamas y cualquier acumulación de residuos en el cuero cabelludo. Hazlo diariamente con tu shampoo habitual y con un shampoo anticaspa dos veces por semana.
Editor’s tip: Si necesitas o prefieres lavarte el pelo con mayor frecuencia, te recomendamos el shampoo y tratamiento acondicionador Sedal Limón y Matcha. Esta línea purifica y le da brillo al cabello, y lo protege de la contaminación. 97% de sus ingredientes son de origen natural y está libre de siliconas, parabenos y colorantes, así que no temas usarla a diario.
¿Cuándo no lavar el cabello diario?
No todos los tipos de cabello toleran un lavado diario. El cabello grueso tiende a ser más reseco, por lo que quizá puedan pasar dos o tres días hasta que empiece a tornarse grasoso. Lo mismo sucede con el cabello seco o dañado.
Las cabelleras tupidas o rizadas tienden a resecarse, se vuelven quebradizas o se rompen si las lavas a diario o incluso cada dos días. Si tienes el cabello afro, se recomienda que lo laves cada semana o cada dos semanas.
Por otro lado, debes lavar el cabello sometido a tratamientos químicos dos o tres veces por semana, ya que los tratamientos químicos, como los tintes y los alisados, hacen que el tallo piloso sea más propenso a dañarse.
Algunos medicamentos, como las estatinas, los antihistamínicos y los diuréticos, también pueden aumentar la sequedad de la piel y el cuero cabelludo. Si los tomas, lávate el pelo con un shampoo suave que contenga humectantes para evitar la resequedad y la irritación.
La edad también influye en la frecuencia de lavado. La producción de sebo suele ser lenta en la primera infancia, se dispara en la pubertad, se estabiliza en la edad adulta y se ralentiza de manera gradual a partir de los 70 años. Por lo tanto, si eres mayor, quizá tu cuero cabelludo esté más seco y no necesite un lavado diario.
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¿Cada cuánto se debe lavar el cabello si hago ejercicio?
Considera qué tanto sudas después de ejercitarte. Si el sudor no ha alcanzado a humedecer la línea del nacimiento de tu cabello, probablemente puedas prescindir del lavado.
Ahora bien, si tu práctica es más intensa y constante —desde una clase de spinning hasta una rutina de crossfit—, quizás debas considerar lavarte el cabello diariamente. El exceso de sudor puede debilitar la fibra capilar y acortar el ciclo de vida de tu cabello.
No obstante, abstente de lavarlo más de una vez al día —lo cual terminaría por resecarlo— y usa productos hidratantes y humectantes.
Editor’s tip: Considera aplicar shampoo en seco previamente, de manera que absorba el sudor mientras te ejercitas. Eso sí, nunca lo hagas sobre el pelo húmedo, pues dejará un residuo pastoso.
¿Cómo lavar el cabello correctamente?
Lavar el cabello correctamente es importante para mantenerlo limpio y saludable. Estos son los pasos para hacerlo de manera efectiva:
- Moja el cabello. Comienza mojando completamente el cabello con agua tibia. Asegúrate de que todo el cabello esté saturado antes de aplicar el shampoo.
- Aplica shampoo. Vierte una cantidad adecuada de shampoo en la palma de tu mano (la cantidad dependerá de la longitud y grosor de tu cabello) y frota las manos para distribuirlo uniformemente. Luego, aplica el producto en el cuero cabelludo y masajea suavemente con las yemas de los dedos. Concéntrate ahí, donde se acumulan los aceites y la suciedad, y evita frotar excesivamente las puntas, ya que pueden resecarse.
- Enjuaga. Después de masajear el cuero cabelludo con el shampoo, enjuaga bien el cabello con agua tibia. Asegúrate de eliminar todo el producto y la suciedad.
- Aplica acondicionador. Aplica una cantidad adecuada de acondicionador en las palmas de tus manos y luego distribúyelo uniformemente desde la mitad del cabello hasta las puntas, evitando el cuero cabelludo. Deja que actúe durante unos minutos y luego enjuaga con agua tibia.
- Enjuaga con agua fría. Al final, puedes enjuagar el cabello con agua fría para cerrar las cutículas y darle brillo.
- Seca el cabello. Después de lavarlo, envuelve suavemente el cabello en una toalla para quitar el exceso de agua. Evita frotar vigorosamente el cabello con la toalla, ya que esto puede dañarlo. Luego, puedes dejar que el cabello se seque al aire o usar una secadora a baja temperatura si es necesario.
Recuerda que la frecuencia de lavado y los productos que uses pueden variar según tu tipo de cabello y preferencias personales. Es importante encontrar el equilibrio adecuado para mantener el cabello limpio y saludable.
Cepillo para lavar el cabello
Aunque no es imprescindible, el cepillo para lavar el cabello se ha hecho viral últimamente porque optimiza la distribución del shampoo y los tratamientos capilares. Sus cerdas de silicona son muy suaves y consiguen eliminar las células muertas, mediante un masaje del cuero cabelludo. Así, se reduce la caspa, la descamación y los picores. De esta manera, el cabello crece más sano y fuerte y disminuye su caída.
Otra ventaja de este accesorio es que cuenta con un diseño muy ergonómico, que permite usarlo con total comodidad. Se recomienda utilizarlo con el pelo húmedo, pero también se pueden realizar masajes suaves con el pelo seco o para ayudarnos a extender el gel u otros productos de manera uniforme. Se puede utilizar en cualquier tipo de cabello y longitud, y es apto para adultos y niños.